No te mientas. Nuestro institnto sabe que el pulso binario del Heart of Gold tiembla aún en la cicatriz que nos distancia de la adolescencia. Como una resaca perpetua, mal curada, el viejo Neil vuelve siempre a raptarnos del presente, deseándonos una pesadilla feliz. I want to live, I want to give.
Excusas esforzarte. Por mucho que la intentes ahogar, la voz de la primera juventud vendrá a tomar por ti la decisión más inocente y utópica de entre todas las posibles. Así que relájate y brinda. Aunque sea por la voluntad incumplida de no querernos dañar.
Rosalía Fernández Rial
Foto: Neil Young en la playa
(intuyo que el fotógrafo fue Bob Seideman)